Gobierno de Dina Boluarte dispone cambiar a generales PNP tras informe de la CIDH
A pesar de que se buscó quitarles peso —desde el Ejecutivo— a las conclusiones del informe final de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sobre las responsabilidades del Gobierno en lo que se denominaron posible “ejecuciones extrajudiciales” y “violaciones a los derechos humanos” durante las protestas, la presidenta Dina Boluarte sí tomó acciones a raíz de la publicación del contundente documento. Este miércoles 10, se dispuso una reorganización en la Policía Nacional del Perú (PNP).
Como consta en la Resolución Suprema Nº 088-2023-IN, publicada en El Peruano, el Ejecutivo dispuso “aprobar la reasignación en el cargo, por la causal de necesidad del servicio, con y sin costo para el Estado, de los Oficiales Generales de Armas de la Policía Nacional del Perú”. En total son 13 los generales PNP que fueron cambiados de puestos.
El principal cambio es del general PNP Víctor Zanabria Angulo (el tercero de la lista), quien se desempañaba como jefe de la Séptima Región Lima, ahora pasará a ser jefe de la Dirección Nacional de Orden y Seguridad. Él fue uno de los principales implicados en la represión policial contra los manifestantes efectuada en la capital.
También se observan cambios en cuanto a la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri), grupo de investigación policial que estuvo involucrada en la cuestionada intervención —calificada como desproporcionada desde diversos sectores— al campus de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM). El ex GEIN Luis Flores Solis (general PNP) reemplazará al general Oscar Orriola en la jefatura de Dirincri.
Recientemente, el semanario Hildebrandt en sus trece reveló que el documento remitido por el Gobierno de Dina Boluarte y Alberto Otárola reconoce ante la CIDH que los responsables de las muertes producidas durante las protestas fueron los policías y militares. El Gobierno habría reconocido que existió un uso excesivo de las armas de fuego y anunció una reorganización de las fuerzas del orden, la cual habría iniciado con este cambio de 13 generales PNP.
En tanto, tras la filtración de la respuesta del Gobierno a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, rápidamente la jefa de Estado salió ratifica su “pleno respaldo” a las fuerzas del orden, pese a que abiertamente aboga por la individualización de las responsabilidades por las muertes de manifestantes. Así restando peso a su cargo como jefa suprema de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
“Como presidenta de la República ratifico mi pleno respaldo a las Fuerzas Armadas y a nuestra Policía Nacional por su trabajo heroico y abnegado en favor, integridad nacional, orden interno, y desarrollo del país”, dijo solo horas antes de disponer la reestructuración en la PNP.
